domingo, 20 de diciembre de 2009

(L).


-"Te quiero más que a nada en el mundo.


¿No te basta eso?"

-"Si, es suficiente. Suficiente para siempre."








-Dime que piensas.

-Deseaba poder saber qué pensabas tú, y....

-¿Y?


-Quería poder creer que eres real.

Y deseaba no tener miedo.

-No quiero que estés asustada.
















-''Volveré tan pronto que no tendrás

tiempo de echarme de menos.

Cuida de mi corazón lo he dejado contigo''











Y de ese modo el león se enamoró de la oveja..

-¡Qué oveja tan estúpida!

-¡Qué león tan morboso y masoquista!

miércoles, 15 de octubre de 2008

-Lamento que se haya producido algún tipo de malentendido, pero Bella no está disponible esta noche -el tono de su voz cambió, y la amenaza de repente se hizo más evidente mientras seguía hablando-. Para serte totalmente sincero, ella no va a estar disponible ninguna noche para cualquier otra persona que no sea yo.




Edward. Y

viernes, 3 de octubre de 2008

Edward Cullen

Nombre completo: Edward Anthony Masen Cullen.
Especie: Vampiro
Fecha de nacimiento: 20 de junio de 1901
Fecha de transformación en vampiro: 1918
Originario de: Chicago, Illinois
Color del pelo: Castaño claro
Color de los ojos: Dorados/Negros
Estatura: 190 cm
Descripción física: Desgarbado. Aspecto juvenil. Pelo desordenado.
Talentos especiales: Leer las mentes
Ocupación: Matriculado en el instituto de Forks
Familiares: Hijo natural de Edward y Elizabeth Masen. Hijo adoptivo de Carlise y Esme Cullen, hermano de Alice y Emmett Cullen así como de Rosalie y Jasper Hale.
Quién le transformó: Carlise Cullen
Hobbies: Colecciona coches, toca el piano
Coche: Volvo S60R (plateado).
Historia personal: La vida humana de Edward en Chicago era feliz y tranquila. Sus padres tenían bastante dinero porque su padre fue un abogado de éxito. La mayor preocupación de su madre era el hecho de que había estallado la Primera Guerra Mundial y a Edward le faltaba solo un año para alistarse ya que la edad mínima había sido reducida a 18 años en agosto de 1918.En septiembre del mismo año la epidemia de gripe mató a los padres de Edward y estuvo a punto de acabar con él también. Su médico fue Carlise Cullen, el cual le salvó la vida transformándole en vampiro. Fue la madre de Edward quien le pidió al doctor Cullen que salvara a su hijo. Ella parecía saber que Carlise podría salvarle de una manera especial y le suplicó que lo hiciera.A partir de ese momento, Edward, se hizo pasar por el hijo adoptivo de Carlise o por el hermano menor de su esposa, hasta que la familia se trasladó a su hogar actual. Ha estudiado dos veces la carrera de medicina, pero nunca la ha ejercido. Le encanta conducir deprisa y colecciona coches como afición.Desde 1927 hasta 1931 Edward tuvo un período de rebeldía y durante esos años vivió por su cuenta lejos de Carlise y Esme. Creyó que podría alimentarse de humanos si fueran realmente malvados y usaba sus habilidades especiales para evitar a los inocentes. Después de un tiempo descubrió que “no podía rehuir la deuda de haber tomado demasiadas vidas, sin importar cuánto se lo merecieran”, y regresó con Carlise y Esme, que le acogieron con los brazos abiertos.Alrededor de 1936, Edward se mudó a Forks con su familia y allí encontraron a los Indios Quileute que tienen la capacidad de transformarse en lobos. Llegaron a un acuerdo: los licántropos permitirían vivir allí a los Cullen mientras no mordieran a nadie y se mantuvieran lejos de las tierras de los Quileute. Los Cullen vivieron en Forks algunos años antes de mudarse a otros lugares.En 2003 los Cullen volvieron a Forks. Entonces, en 2005, Edward conoce a Isabella Swan. Su sangre le atrae y comienza a encapricharse de ella. Bella comienza a figurarse su secreto y acepta que él sea un vampiro. Ellos se enamoran a pesar de los innumerables inconvenientes. Cuando Bella se convierte en víctima de un cazador llamado James, Edward se ve forzado a beber su sangre para evitar que el veneno se extienda por su cuerpo.Edward se quedó con Bella hasta su desastrosa fiesta de 18 cumpleaños, tras el cual tuvo que replantearse el futuro de su vida con él. Decidió que Bella estaría mejor viviendo una vida normal sin él, y abandonó Forks con su familia. Pasó el tiempo persiguiendo a Victoria por el Sur de los Estados Unidos y llegó hasta México y América del Sur. Cuando le dicen que Bella está muerta, viaja a Italia con la intención de suicidarse. Bella y Alice llegan justo a tiempo para pararlo. Convence a los Vulturis para que les dejen regresar a todos a Forks con la promesa de que Bella sería convertida en vampiro.El regreso a Forks, significó la vuelta a la rutina normal en la vida de Edward y Bella. Este accedió a convertirla él mismo si antes se casaba con él. Luego Jacob Black le recuerda la tregua dice que estaba prohibido morder a un humano.Unas noticias llegan poco después, que alertan a Edward y a su familia de que un vampiro joven está suelto en Seattle. Esto unido al deseo de Bella de hacer las paces con Jacob, saca el lado más sobreprotector de Edward. Se la lleva a Florida a visitar a su madre, incluso hace que Alice la secuestre cuando él este fuera cazando. Al final permite que Bella vea a Jacob, llegado a la conclusión de que es mejor para ella que fuese a visitarlo segura antes de que se intente escapar para verlo.Cuando Edward recoge el olor de un vampiro desconocido que ha estado en la habitación de Bella, su preocupación lo lleva a la posibilidad de luchar con los recién nacidos de Seattle. El día de graduación se acerca y Bella les dice a Edward y al resto de los Cullen que cree que Victoria es la que está creando a los recién nacidos. Está información hace que haya una sorprendente alianza entre los Cullen y los Quiletes, no solo para proteger a Bella, sino para evitar que los recién nacidos ataquen a nadie más. Para calmar los nervios de Bella sobre el ataque, Edward acepta quedarse fuera de la batalla y quedarse con ella. Bella y Edward llegan a otro compromiso, ella se casará con el con la condición de que hagan el amor mientras todavía sea humana. Edward ayuda a Bella a prepararles una trampa a los recién nacidos para que sigan su pista hasta el claro donde tendrá lugar la pelea. Tras pasar una noche fría, viendo a Jacob dormir junto a Bella para calentarla., deja que Jacob y Bella se despidan, lo que incluye un beso permitido de Bella. Bella le asegura a Edward que le quiere más y quiere estar con él para siempre. La consecuencia de la batalla trae a Victoria y a su ayudante personal, Riley al refugio. Edward y Seth Clearwater los matan y queman. Cuando Jane y los Vulturis llegan para limpiar Edward intenta salvar a algunos de los recién nacidos, pero no puede. Después de que Bella le diga su adiós final a Jacob, Edward fue y la recogió de su coche y la sostuvo durante toda la noche mientras lloraba. A la mañana siguiente Bella le dice a Edward que ha echo su elección y que ha llegado el momento de hablar con Alice sobre su boda. Más tarde, en contra de lo que le pidió Bella, Edward le envía una invitación a la boda a Jacob, dándole las gracias personalmente por todo lo que había hecho para proteger y cuidar a Bella.



Crepúsculo, un amor peligroso


Hay tres cosas de las que estoy
completamente segura.

Primera, Edward es un vampiro.

Segunda, una parte de él
se mure por beber mi sangre.

Y tercera,
estoy total y perdidamente
enamorada de él.





Luna Nueva


"Cuando el papel me corto el dedo,
sólo salió una gota de sangre del pequeño
rasguño. Entonces, todo pasó muy rápido.
"¡No!", Rugió Edward. Se arrojó sobre mí,
lanzándome contra la mesa y aterricé en un
montón de cristales hechos añicos. Jasper chocó
contra Edward y el sonido pareció el choque
de dos rocas... Aturdida y desorientada, miré
la brillante sangre roja que salía de mi brazo
y después a los ojos enfebrecidos de seis
vampiros repentinamente habrientos..."

martes, 30 de septiembre de 2008

Eclipse


De pronto, saltó una chispa
de intuición en aquel silencio sepulcral
y encajaron todos los detalles.
Algo que Edward no queria que supiera.
Algo que Jacob no me hubiera ocultado.
Algo que habia hecho que los Cullen
y los licántropos anduvieran juntos por los
bosques en peligrosa proximidad.


Algo que, de todos modos, habia esperado.
Algo que yo sabía que volvería a ocurrir,
aunque deseara con todas mis fuerzas
que no fuera así.

¿Es que nunca jamas se iba a terminar?

Amanecer


“No tengas miedo”, le susurré.
“Somos como una sola persona”
De pronto me abrumó la realidad de mis palabras.
Ese momento era tan perfecto, tan auténtico. No déjaba lugar a dudas.
Me rodeó con los brazos, me estrechó contra él y hasta la última de mis terminaciones nerviosas cobró vida propia.
“Para siempre”, concluyó.